Cuando arte y fotografía se juntan

Cuando dos complementos de las Bellas Artes cómo son la fotografía y el arte, se dan la mano en un libro de gran formato, surgen maravillas editoriales como esta. Tras la publicación de sendos libros dedicados a la Basílica del Pilar y a la Seo de San Salvador de Zaragoza, ambas fotografiadas magistralmente por el maestro José Antonio Duce, llega ahora un nuevo volumen profusamente ilustrado sobre la Catedral de Santa María de Mediavilla, o lo que es lo mismo, la Catedral de Teruel. Para esta ocasión se ha contado con la extraordinaria profesionalidad del fotógrafo Antonio Ceruelo, gran experto en todo lo que tiene que ver con restauración monumental, pero también con la arquitectura, industria, etnología, paisaje…etc…
     Cómo en los anteriores libros, prima más la imagen que la palabra, dividiendo el libro en seis partes que van desde el exterior, pasando por las partes más importantes del interior de la catedral cómo la propia techumbre, el Retablo Mayor o las diversas capillas adyacentes. Y es que una catedral, aunque esté echa con cal, arena, ladrillos y cerámicas, es un ser vivo, pues conserva el testimonio y las huellas de la sociedad que le tocó vivir, en este caso desde el siglo XIII.
    El artista-fotógrafo ha sabido desvelar en su plenitud   cómo nadie la belleza y el misterio. La magnificencia del Renacimiento turolense reflejado en el Retablo Mayor a través de las buenas artes del francés Gabriel Yoli, convive perfectamente con otros ornamentos igualmente importantes pero no tan vistosos que la cámara fotográfica de Ceruelo capta a la perfección. Y todo ello siendo observado y meditado por el gran pergamino desplegado a lo largo de toda la nave central que es la techumbre mudéjar, donde los diversos personajes que vivieron realmente esa época, con sus oficios, sus costumbres, aparecen rodeados de animales fantásticos, botánica, magia y sobretodo fe. Y el poder ver todos esos detalles a través de este libro cómo si el lector estuviera ahí mismo, es sencillamente una maravilla.
    Pues en el fondo, no debemos olvidar que estas publicaciones tienen como fin último conservar, estudiar y divulgar el extraordinario patrimonio histórico-artístico de Aragón.
 
 
 
 
PARA SABER MÁS: 
La Catedral de Teruel
Antonio Ceruelo
Caja Inmaculada (CAI). 2009